Carpas

Al hilo de la entrada anterior, quiero publicar otro relato. Este no es mio. Mis amigas Elena y Laura y mi hermana Ana, lo escribieron a la limón en un viaje hace algún tiempo. Ni que decir tiene el impacto que pudo causar en las 3 el libro de "Ajuar Funerario" de Fernando Iwasaki.

Pero ellas, fueron primero... tuvieron la idea y la escribieron. Mucho antes de que yo pensara en hacer algo similar. Y para mi sorpresa, me la regalaron. Es imposible que ni yo ni nadie que no sea ellas 3 pueda entender la cantidad de bromas privadas que hay en cada línea. Pero aún así, funciona perfectamente.

Por todo ello y porque no tiene desperdicio alguno... quiero compartirlo. Directamente como se concibió.



Mamá decía que no remara tanto, pero ella nunca le escuchaba.

Traía el pan desde muy lejos y quería que hasta la última criaturita del estanque se cebara.

Con un poco de pimienta sabría mejor...

Ella sabía que no eran buenos.

El turbio y rojizo agua por el que se deslizaba causaba un escalofriante revuelo entre las aves.

Remaba muy fuerte y la barca zozobraba.

La niña cayó.

Eran enormes.

Algunos patos no tenían pezuña.

(E. Harley Kawasaky)